Publicado en 1954, Poemas y antipoemas causó una revolución dentro de las letras chilenas e hispanoamericanas. En los antipoemas de Nicanor Parra puede observarse cómo aquella tradición lírica es definitivamente superada y vista desde una mirada irónica y burlesca. En este libro cobra vida el gesto poético de Parra: ese por el que la poesía abandona su apego, hasta entonces incuestionado, a lo profundo y grave, a lo sublime y lo oscuro. Esto no significa que estos tópicos no existan en estos versos. Temas como la muerte, el tiempo, la vejez, entre otros abundan en la antipoesía parriana. Sin embargo, estos versos abordan tales cuestiones con un distanciamiento irónico y burlesco de toda la retórica con la que ellos habían sido tratados. La constante apelación a la risa y al absurdo, marcan el inicio de un nuevo proyecto poético o antipoético radicalmente distinto a los anteriores, que la obra posterior del poeta ilustra y profundiza. Para el crítico literario Federico Schopf, en esta obra: "Los poemas se convierten en la prehistoria y comienzos de una nueva e irresistible lectura del mundo. En ellos, el nuevo verbo no sólo rechaza al anterior, sino que también lo acoge en su verdad más amplia y radical (...) El mundo de los antipoemas es el mundo de la enajenación absoluta: el ser humano no es relativo a nada, su diálogo es con la ausencia o un conjunto de máscaras". (Schopf, Federico. "Poemas y Antipoemas: Tercera edición de una lectura". La Nación, octubre, 1967)
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