Estaba en la esquina de la Alameda con huérfanos esperando impaciente a mi amiga que ya estaba atrasada para la inauguración de la exposición de un amigo pintor, por fin llegó y nos fuimos raudos a la exposición. Llegando, fuimos directo donde nuestro amigo pintor quién nos saludó muy alegremente. Al finalizar las palabras del maestro de la ceremonia se dio por inaugurada la exposición y junto con mi amiga empezamos a mirar detenidamente los cuadros y comentarlos. Después de un buen rato de recorrer el laberinto de pinturas, nos acercamos a una pintura de un retrato de una mujer que tenía estrabismo en sus ojos. Yo le dije dándomela de entendido en la materia y para impresionarla, que el pintor la amaba a pesar de ciertos defectos físicos. Ella en su frialdad objetiva simplemente dijo que era una pintura donde se mostraba el patriarcado y el machismo. En eso que nos lucíamos con nuestras tesis, apareció sonriente el autor de la obra. Y le dije- ¿tuviste una amante con estrabismo?, ¿por qué la pintaste así? -. y él, muy extrañado mira su pintura y salta la cuerda que lo tenía separado acercando su vista al cuadro, momento en que nos dimos cuenta que alguien había matado una mosca en su cuadro, que él retiró con la uña con mucho cuidado. riendo de la situación, los tres nos dirigimos a la zona de coctel por unas copas de un exquisito vino carmenere 2012, al mismo tiempo que brindamos por la mayestática exposición, sin ignorar la mirada cómplices y risueña por tamaña anécdota.
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