El MOLINO DE VIENTO
- Florentino Carreño
- 12 jul 2020
- 1 Min. de lectura
(A la compañera Vilma)
Pétalos rojos afloran
en las puertas de “La Alhambra”
Vilma amanece con su sonrisa
saluda a sus parroquianos
con reminiscencias de España
Ella la de mano fraterna
la compañera solidaria
la escuchan en Rosenquist
la aguardan en Huanguali
o en los recodos de caminos
sombreados de eucaliptos
de campos ausentes
de molinos de viento
de trinos en sus aspas
en un festín primaveral
Por esos recovecos
llegó el aciago día
de septiembre
Prisionera la democracia
se flagelaba la alegría
se torturaba la esperanza
sospechosa era la noche
letal el día
Vilma tarquinada por esbirros
en la cubierta del Lebu
que desguazaba sus cadenas
gangrenadas en la bahía del Puerto
Hasta que extravió la huella de sus pasos
en los imaginarios caminos
de algún villorrio colombiano
dejando añoranzas de trinos
en un solitario molino de viento
Lewfû Lewfû Lewfû
ya no afloran pétalos rojos
por su cuerpo yelo
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