Rosita Serrano, nombre artÃstico de MarÃa Ester Aldunate del Campo​​ fue una cantante y actriz chilena nació el 10 de Junio 1912 y fallece el 6 de abril de 1997.
Puede sonar cliché, pero la vida de la cantante chilena MarÃa Esther Aldunate del Campo, más conocida como Rosita Serrano, fue una montaña rusa de emociones.
La diva chilena lo tuvo todo: amor, admiración, dinero y éxito, pero para el ocaso de su vida se quedó sin nada.
Su altÃsima y aterciopelada voz enloqueció a millones de europeos, especialmente a alemanes y altos jerarcas nazis.
Rosita recibió la manifiesta admiración de Adolfo Hitler, Hermann Göring y Joseph Goebbels, quienes no dejaban de elogiar el talento de la chilena.
Era la década del '30 y todos hablaban de una mujer de un metro ochenta de altura, grandes ojos verdes y cabellera castaña muy arreglada.
El "ruiseñor chileno" (Der chilenische Nachtigall), como le apodaron los alemanes por sus particulares silbidos al cantar, llegó a ser tan famosa como las artistas germanas Zarah Leander y Marlene Dietrich.
"TenÃa un don sobrenatural, pero además de ese don, lo más espectacular era su creatividad… era como alguien que se pone a bailar, ¡pero ella lo hacÃa con su voz!", le cuenta a BBC Mundo Isabel Aldunate, sobrina de la cantante.
Y seguramente también ayudó que fuera incluida por el ministro de propaganda nazi Joseph Goebbels en el programa "Kraft durch Freude", un sistema que querÃa organizar todo el tiempo libre de los ciudadanos alemanes.
La joven veinteañera llegó a BerlÃn con una maleta repleta no solo de ropajes, medias y maquillaje, sino también de sueños.
En la capital alemana esperaba concretar su gran anhelo: ¡cantar, cantar y cantar!
Nacida en la ciudad de Quilpué, llegó a Alemania no solo para interpretar clásicos como Roter Mohn, Schön die Musik o Küß mich, bitte, bitte, küß mich, entre un interminable listado de temas, sino también para poder estar con su madre.
La soprano chilena SofÃa del Campo, mamá de Rosita, se habÃa casado en segundas nupcias con un millonario empresario de apellido Salvaj, quien vivÃa en BerlÃn, y además se encontraba ligado al Régimen de Adolfo Hitler.
La familia de Rosita tenÃa tradición musical. Llevaba "die Musik im Blut!" (la música en la sangre), le decÃa constantemente a medios de comunicación germanos.
SofÃa del Campo entre los años 1916 y 1930 hizo carrera como cantante de ópera en Estados Unidos y en algunos paÃses de Europa.
Su abuela también fue una virtuosa pianista, y su bisabuelo, un fabricante de instrumentos. Hoy, una de sus sobrinas, Isabel Aldunate, es también una connotada cantante.
Llegan los aplausos!!!
En Alemania, Rosita estaba convencida de que con su talento cautivarÃa. Sólo con su voz y la guitarra, se presentó en la compañÃa disquera alemana Telefunken.
Encantados con su energÃa, el sello la convirtió rápidamente en una de sus principales estrellas. Con Telefunken produjo alrededor de 81 temas, todos grabados en Alemania y Suecia.
Llegó a tener un auto diseñado a su antojo gracias a sus admiradores de Mercedes Benz.
El compositor Michael Jary compuso especialmente para ella y dirigió gran parte de sus grabaciones.
La fama vino con rapidez y también los contratos, las giras por toda Europa y el dinero. ¡Todo era glamour!
"TenÃa incluso un auto hecho a su medida. Con el tapiz verde, como el color de sus ojos, decÃa ella. Sus admiradores le hicieron un Mercedes Benz a su pinta", le cuenta a BBC Mundo Juan Dzazópulos, amigo de la cantante.
Y en el teatro Wintergarten de BerlÃn llegó la consolidación para la estrella latina. En ese mismo escenario cantó hasta 1942, para cuando Europa se encontraba en plena II Guerra Mundial.
"El arte jamás puede estar mezclado con la polÃtica", era un lema que la cantante chilena repetÃa constantemente.
Pero en 1943, antes de que comenzaran los bombardeos sobre BerlÃn, el arte y la polÃtica se mezclaron.
Después de haber cantado para los nazis, a Rosita se le acusó de ser una espÃa a favor de los aliados.
Según antecedentes que aporta la familia Aldunate, mientras la cantante vivÃa en Alemania realizaba vuelos nocturnos clandestinos para cantar a los judÃos que se encontraban protegidos en Suecia.
La chilena cantó sin distinción, en hospitales para heridos de guerra, y tanto para partidarios como para contrarios al régimen.
Y la situación llegó a su clÃmax un 5 de noviembre de 1943, cuando se despachó una orden de arresto desde BerlÃn.
Cuando llegó la acusación, sin embargo, "el ruiseñor chileno" ya se encontraba en Suecia. Allà habÃa sido cálidamente recibida por su Ãntimo amigo el Rey Gustavo de Suecia.
"La guitarra de Rosita estaba firmada por el mismo Rey, que era un gran admirador", cuenta a BBC Mundo Isabel Aldunate.
Y la cantante encontró protección en Suecia, aunque ya sin fortuna, pues la habÃa perdido toda en Alemania.
"En Suecia recomenzó. Además, si volvÃa a Alemania se le acusarÃa de espÃa. Los nazis sólo le permitieron sacar sus maletas y la suma de 10 marcos", cuenta a BBC Mundo Juan Dzazópulos.
Pese a que tuvo que partir de cero, Rosita ya habÃa construido una carrera y tenÃa admiradores por toda Europa, quienes también elogiaban su talento polÃglota (hablaba más de 3 idiomas).
Y en el oriente, durante una gira que realizó en 1947, se enamoró. El millonario egipcio Jean Aghion, un abogado dueño de una fábrica de cristales e hijo del "Rey del Algodón", la llevó al altar.
Con este egipcio-francés, de familia judÃa, fijó residencia durante muchos años en AlejandrÃa, Egipto.
"Mi tÃa me contaba que en AlejandrÃa vivÃan como reyes, porque además eran muy cercanos con el rey Faruq I de Egipto, pero todo esto se vino abajo cuando en julio de 1952 ocurrió el golpe militar", relata a BBC Mundo Isabel Aldunate.
El coronel Gamal Abdel Nasser destronó al entonces rey Faruq. Bajo el nuevo orden se confiscaron empresas, incluidas las del esposo de Rosita.
La cantante perdió asà sus nuevas riquezas y un matrimonio de 15 años legó a su fin cuando su esposo falleció en ParÃs en 1963.
Pero "la música, el amor y los hombres atractivos son lo mejor de la vida", decÃa sin ruborizarse la cantante. Y un nuevo, último amor llegarÃa con Will Williams, cineasta alemán, dibujante y pintor.
Se cierra la función
La carrera artÃstica de Rosita, que se extendió desde 1938 hasta 1976, sin embargo, parecÃa acercarse a su fin.
Las luces se hacÃan cada vez más tenues para esta artista chilena, quien grabó cerca de 160 temas con diferentes sellos musicales y participó también de pelÃculas, donde mostraba sus dotes vocales.
El panorama ya no era el mejor, aunque con su última pareja, aparecieron algunas esperanzas.
Surgió la idea de apostar por Hollywood, ya que el dibujante alemán tenÃa muchos contactos y habÃa pintado cientos de posters de conocidos filmes de la época, como el clásico alemán Der Blaue Engel (El ángel azul), con Marlene Dietrich.
Pero los proyectos de llevar al ruiseñor a Hollywood no funcionaron. Las luces se apagaron para siempre, y Rosita se radicó definitivamente en Chile en noviembre de 1991, sin dinero y sin la fama de antaño.
El reconocimiento en su paÃs nunca llegó, ni tampoco la pensión de gracia solicitada por su sobrina.
"La presenté al Ministerio del Interior. Me tramitaron mucho y cuando me avisaron que habÃa salido, yo les dije muy seca: muchas gracias, pero mi tÃa se murió hace tres meses, hasta luego", cuenta a BBC Mundo.
Rosita falleció el domingo 6 de abril de 1997, a las 16.20 horas, a causa de una bronquitis crónica que la tuvo internada durante varios meses en el hospital del tórax en Santiago.
https://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-36735309