Todo comenzó en el silencio
era lo primero
sus palabras las repite el viento
las hojas en el árbol
no se detienen
¡Dios viene!
Como un suspiro en la eternidad Sus versos
un huracán
¿Acaso el sol se apagará?
No quedan limites en el hombre
ni en las ciudades desoladas
solo quedan árboles quemados
y cuerpos secándose en el mar Lo que ayer fue el silencio
poco a poco la vergüenza
el hombre puso versos amargos
mancho la verdad
¡Fue entonces
que hemos deseado la maldad!
Renacerá la palabra
porque Dios nos ama
y porque el tiempo
no se detiene
¡Jesús llegará!