Este es un libro diferente, lo que lo hace significativamente más atractivo. Su autor, que se hace llamar “Subjetivo”, es un cronista excepcional. Nos lleva por calles, callejuelas y pasajes de un Santiago que recorremos a diario; sin embargo, es la mirada crítica de este escritor lo que nos hace descubrir rincones y personajes únicos., a pesar que de algún modo sabíamos de su existencia pero nunca nos llamó la atención. Porque miramos, pero no vemos.
A poco andar en la lectura, sorprende nuestra abierta disposición para aceptar su seudónimo o sobrenombre, incluso dibujarlo en la imaginación como se nos antoje, invitados por las historias urbanas que narra, con un vocabulario ameno, atrapante. Solo un personaje llamado Subjetivo, puede pretender hablarnos con la sutil ironía con que analiza el entorno; entorno que es el mismo nuestro y pareciera que lo vemos por primera vez.
De este modo, el autor sutilmente logra arrancarnos más de una sonrisa, a veces la carcajada.
Comments