La casa bailarina es uno de los poemas más bellos que he leído. El poeta no se forma NACE Y Leo Lobos lo es. Le conozco hace años y vivo enamorada de su poesía. Ser poeta no es cualquier cosa, es jugar con las palabras y enganchar al lector en el recorrido de sus poemas. Además, Leo Lobos es artista audiovisual, sus trabajos son extraordinarios por el colorido que él les impregna. Llaman la atención. Hizo una labor increíble con las esculturas que dejara en vida el Profesor Recabarren, en el hermoso pueblo de Nos. Digno de ser visitado, una casa Museo de los tiempos de la Reconquista.
Pero hoy hablaremos de “La Casa Bailarina”, poema inspirado en “La casa Danzante” de la ciudad de Praga. Una construcción que llama la atención por su forma, pareciera que en cualquier momento se pone a bailar. Tuve el privilegio de verla cuando con mi hermana visitamos Europa.
Y ahora Leo Lobos se inspira en un bello poema
Está escrita en tres idiomas: español, portugués e inglés.
La portada del libro también la ideó Leo, una imaravillosa y verdadera explosión de colores, su forma de entregar belleza pictórica, que me enloquece (creo que a muchos) Es un poemario original, novedoso, atrapante. Poemas breves, profundos, que nos hacen pensar y desear un mundo libre de odios, del consumismo, de la maldad. Porque donde hay belleza, hay amor.
“Poemas/para espantar/el odio/la rabia/y la locura”. Es una declaración de paz del poeta, de recuperar el equilibrio perdido. Memoria, sensibilidad y honestidad es lo que pretende el vate y para ello busca constantemente la música secreta en las palabras, la constante conquista de la belleza.
Un libro, una obra de arte.
