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UNA PIEDRA EN TU CAMINO

En algunos casos los minerales tienen su nombre gracias a cualidades muy evidentes, mientras que en otros puede tratarse de una coincidencia:

Hoy les quiero presentar la magnetita

Este mineral de hierro fue descubierto en la antigüedad, y aunque por su nombre es muy fácil asociarla al magnetismo, no hay un consenso absoluto respecto a esto. Por una parte, se menciona en antiguas historias que un pastor de nombre Magnus habría descubierto el mineral en el monte Ida, al notar que el metal se adhería a él; por otro lado, también se dice que podría recibir este nombre gracias a la ciudad de Magnesia de Tesalia, ubicada en Grecia.


El aspecto visual de esta piedra es muy llamativo, ya que su color negro destaca por tener un lustre metálico, lo que la hace resaltar de otras piedras de tonalidades parecidas. Es posible que se encuentre en masas granuladas que presentan detalles muy pequeños, aunque también es posible encontrar cristales octaédricos de tamaño mayor; es en estos casos cuando su lustre metálico hace lucir esta piedra: las distintas facetas reflectan muy bien la luz y hacen destacar el hermoso color negro, ya sea en un tono negro hierro o en negro grisáceo. El color de los imanes comunes que conocemos está relacionado con estos tonos, aunque es menester decir que el mineral al natural tiene un color muchísimo más tractivo a la vista.



Si bien la magnetita es una mena de hierro muy importante, y también se usa como añadido natural de alta densidad para fabricar hormigones, existe un uso natural de este mineral, que ayuda mucho a distintos animales sobre el planeta. Algunas aves, insectos y moluscos tienen en alguna parte de su cuerpo minúsculos granos de magnetita, que favorece la magnetorrecepción, una capacidad natural de orientarse determinando la dirección del campo magnético de la Tierra. Esto quiere decir que así como los seres humanos podemos orientarnos sabiendo hacia dónde está el norte o el sur, distintos animales pueden orientarse en su desplazamiento gracias al efecto de magnetorrecepción de la magnetita.



Los coleccionistas también buscan mucho este tipo de ejemplares. Algunos se enfocan en las variedades que se presentan junto a otras piedras con las que hacen contraste, como cuarzo o pirita, mientras que otros se especializan en buscar las piedras de mayor tamaño que tengan facetas bien definidas.

Espero que les haya gustado este paseo por un mineral muy especial; nos encontramos el próximo mes para conocer otra joya natural de la tierra.


Emilio López B. Escritor, contador de historias, coleccionista.

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