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CUENTO LA VIDA

Reconozco que me gusta. Siempre me ha gustado andar por esta vida en traje de mujer.

Me gusta desde las formas externas hasta las prestaciones sensitivas. Y desde la forma femenina la delicia que es poder acoger la forma masculina.

Siempre, desde pequeña que me ha gustado y ya desde entonces lo decía, que si para la siguiente encarnación se me diera la posibilidad de elegir entre volver como hombre o volver como mujer, yo sin un ápice de duda, feliz y agradecida volvería a ser mujer.

Hoy pienso lo mismo, aunque levemente distinto.

Si va a haber otra encarnación y me dan a elegir, yo feliz vuelvo a ser mujer pero EN OTRO PLANETA (más amable y pacífico)

Y aprovecho de avisar/comunicar:

ESTA ES MI ÚLTIMA ENCARNACIÓN EN ESTE PLANETA QUE LLAMAMOS TIERRA.

Ya fue suficiente. He jugado a de todo y lo he dado todo. He hecho lo mejor que he podido, (acaso a ratos eso haya dado algún resultado y en otros ni pío), pero por pasión y entrega no me he quedado. Así que ya estamos listas. Ya de este juego ha sido suficiente. Y la verdad es que a este planeta no quiero volver ni para jugar a ser una hermosa y verde planta.

Y como dicen que las palabras son creadoras y ya que estamos en nuestro día, mí día. Pues he aquí mi decreto:

Esta es la última pasada que me hago por este lindo planetita. Reconozco su exuberante belleza, mi corazón se irá satisfecho, agotado, pero satisfecho.

Reconozco su poderosa medicina de purga divina.

Reconozco también que no tiene ninguna culpa de albergar a este manojo de patéticos boludos que somos los terrícolas.

Ajhó.

Así sea, así es y así será.

8M

Adeviki Prem




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