La suave voz del viento
Trae con sigo
Los últimos secretos,
Que tengo de ti
Siempre se transforman
Para convertirse en nuevos
Y llegar con un espíritu
De renovadas de emociones
Y dimensiones incalculables
Así como tus penetrantes labios clausurados
Que no nesecitaban emitir palabras
Para dejar a fuego
Los bellos recuerdos que tengo contigo
Son misterios
Tan sagrados
Como los susurros
Que provienen
Desde el interior de un templo
Suaves se van acercando
Envueltos en las olas que no envejecen
Como el espíritu de un amor eterno
Que te persigue
Y te besa
A la luz de la luna llena
Cantando su noche profunda
Con sus enamoradas estrellas
Para variar,
Te he llamado:
" La chica del viento"
La que hace bailar las hojas de los árboles
La que despierta las profundas fragancias
Desde el mismo corazón
De los azahares
Entregando tus besos
Como las esporas
Danzando en el viento
Para colonizar todo a tu paso
Como un bendito
E irremediable ángel travieso
No sé por qué
Realmente no sé
Sin que llegásemos a ser nada
Te convertiste en alguien
Tan importante
Quizás,
La promesa hecha sin palabras
De volvernos a ver
En el mismo lugar
Bajo el mismo cielo
Con las mismas estrellas fugaces
Convirtiéndose
En un sello tácito
Sin nombre ni fecha
La verdad,
Quiero dilucidar esto
Pero no logro cuajar
Una respuesta coherente
¿La invisible brisa tal vez,
Que tocaba tu cara?
¿Las incansables olas,
Cantando a lo lejos?
¿O las hojas de los árboles,
Murmurando nuestro cuento?
Es una mezcla fascinante
Donde se encuentra
El olor a la arena seca
Pegada entre tu piel,
Y las estrellas
Todo eso y más
Me trae tu voz que tenía escondida
Guardada
Atesorada
Y la promesa no cumplida
De volvernos a ver
Y en mis brazos.
Silenciosa
Amarte
No porque yo no quisiera
Realmente
No sé
Que pasó en el camino,
No lo sé
Éramos muy pequeños tal vez
Casi púberes
Con el ombligo recién seco
Es extraño el recuerdo
Que tengo de tus besos
Dulces como el vuelo de las mariposas
Suave en su desplazamiento
Perfecto en su imperfección
Inaudible
Como sus delirios erráticos
Con la cabeza llena de constelaciones
Y su envolvente brisa
Que las transportan
De un lugar a otro
Desvariando
Entre la sutil ventolera
Que provocan sus frágiles alas
Y la tierna interrogante de tu mirada
Que las mantienen atadas
A la fugaz idea
De volver a estar contigo
Pero,
Ya lo ves...
Es tan solo el viento
Que no deja de abrazarnos
Comments