Teresa Cornejo Valdés
- entre parentesis
- 4 ago
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Teresa Cornejo Valdés nació en Talca una fresca mañana de otoño. Escribe desde niña, moviéndose entre la narrativa y la poesía. Ha recibido reconocimientos en diversos concursos literarios, lo que ha fortalecido su perseverancia en el noble y solitario oficio de escarbar en la palabra. En su poesía, lo visceral emerge con autenticidad; en su narrativa, un bálsamo se derrama sobre la herida.
Ha colaborado con sus textos en Cuaderno PEN , Antología Peligrosa , Antología de Mujeres Maulinas y otras publicaciones. También ha realizado colaboraciones para el podcast Poetas Ruculistas .
Es voz del espacio radial Historias Nuestras , una serie de capítulos dedicados a difundir las obras de los alumnos del taller de escritura creativa que facilita.
Actualmente reside en la costa del Maule, donde continúa desarrollando su labor como tallerista y gestora cultural.

SI TUVIERA QUE HABLAR DE TI
Evocaría alas de pájaros desarmando las aguas
en partituras cardinale
escribiría a manotazos sobre tu piel
desarticulando los cuerpos precedentes
escucharía tu sangre perforando la profundidad líquida
de mi frecuencia enmudecida
expondría mis raíces temblando al sol
como reflejo caótico de lo que esconde bajo la falda
Haría un paraguas de girasoles con mis muslos.
(ondulantes e íntimos)
y tú, henchido de magia ardiente
¿Descansarías al final?
en un suelo mordisqueado por mis preguntas?
PROMESAS QUE NO CUMPLIRÉ
Prometo buscar nuevas supersticiones
escribir quebradizo desde dentro
disfrutar de pensamientos provisorios
apropiándome de mi rol de impostora
prometo inventar nuevos dioses
Evadirme de la tradición burlando profecías.
cuidar a esa niña que armaron con prisa
dejándole grietas por donde se filtra la luz
prometo dudar de palabras auténticas
negociar los secretos que esconden
del rayo amenazante de las certezas
prometo dudar de mis geografias
semejantes a un santuario ardiendo y
Ensayar cada otoño la escena de mi muerte.
ÚLTIMA PARTÍCULA DE INDECISIONES
Atento contra mí todos los días
sutiles cualidades me desaniman
Me detengo en las nervaduras
disfrutando la ventolera de fantasmas
transitó las calles más oscuras
él retorcido las tibiezas de mi carne
Esas deformidades no permiten ser vasija.
Soy una mujer vulgar destrozando palabras contra el suelo.
miento sobre cosas prohibidas
someto este cuerpo tirano que exige y exige
más temprano que tarde estos huesos vacíos resonarán
quiero volver a escribir antes que llegue septiembre
con esa voluptuosidad destellante
aunque tengo la certeza de que no merezco usar las palabras
porque soy la niña estrepitosa y flaca
jugando a matar luciérnagas, solita en una tarde de domingo.
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